"Deja ir los agravios del pasado para liberar tu mente y encontrar paz en el presente. El recuerdo constante solo perpetúa el sufrimiento. ¡Sé libre y vive en armonía!"
Oprime el BOTÓN para empezar.
Pregunta 1 de 5
1. ¿Qué resalta la declaración de Confucio "Ser agraviado no es nada, a menos que sigas recordándolo"?
La importancia de aferrarse a los agravios pasados.
La irrelevancia de los agravios en la vida.
La necesidad de vengarse cuando se es agraviado.
La influencia positiva de los agravios en la mente.
La importancia de recordar los agravios para evitar que se repitan.
Pregunta 2 de 5
2. ¿Qué significado tiene la frase "Ser agraviado no es nada, a menos que sigas recordándolo" para los alquimistas del alma?
Que los agravios son inevitables y deben recordarse siempre.
Que los agravios son la causa de la infelicidad.
Que los agravios solo tienen importancia si se les da poder en tu mente.
Que los agravios deben olvidarse por completo
Que los agravios son eventos insignificantes en la vida.
Pregunta 3 de 5
3. ¿Qué sugieren los alquimistas del alma sobre el recuerdo constante de los agravios?
Que el recuerdo constante es esencial para la sanación.
Que prolongar los sentimientos negativos a través del recuerdo perpetúa el sufrimiento.
Que el recuerdo constante es necesario para evitar que se repitan los agravios.
Que el recuerdo constante fortalece la identidad.
Que el recuerdo constante es una forma de resistencia al cambio.
Pregunta 4 de 5
4. ¿Qué implica la práctica de soltar y perdonar según los alquimistas del alma?
Negar la realidad de lo que ocurrió.
Liberarse de la carga emocional asociada con los agravios.
Justificar lo que sucedió.
Olvidar por completo los agravios.
Aferrarse a las emociones negativas.
Pregunta 5 de 5
5. ¿Por qué los alquimistas del alma enfatizan la importancia de vivir en el presente?
Porque el pasado es más importante que el presente.
Porque el presente es una ilusión.
Porque el presente es la única realidad.
Porque el presente no tiene valor.
Porque el presente es un recordatorio constante de los agravios pasados.